Algo con una mujer es un film argentino de dos mil veinte, proyectado para la televisión y basado en una obra de teatro de mil novecientos veinte, obra de Julio César Beltzer y titulada La Rosa. La película estuvo dirigida por Mariano Turek y Luján Loioko, que también adaptaron el guion. Fue protagonizada por María Soldi, Maule Vignau y Abel Ayala.
En los años cincuenta, una mujer vive semiabandonada por su esposo, que viaja constantemente. Una noche contempla por su ventana el asesinato de un hombre, en el piso de enfrente. Su marido parece no creerla, y ella empezará a investigar el delito por sí misma. Las circunstancias la llevan a entablar una relación con un vecino.
Algo con una mujer es un film de suspense donde las acciones de cada uno de sus protagonistas hacen que la trama se convierta en tragedia personal. Está muy bien ambientada y el ritmo es el adecuado para llegar al desenlace, con sorpresa incluida. Un film muy logrado y muy digno de ver.
Inside man es una miniserie británica de dos mil veintidós estrenada en castellano como Desde dentro. Consta de cuatro capítulos de algo menos de una hora cada uno, y fue creada y dirigida por Steven Moffat. La protagonizaron David Tennant, Dolly Wells, Stanley Tucci, Lydia West y Lyndsey Marshal.
Un pastor protestante protege a uno de sus jóvenes feligreses. Sabe que está en posesión de filmaciones de menores abusados y le retira el pendrive que las contiene. Este, accidentalmente, llega a manos de la profesora particular del hijo del pastor, que está convencida de que su alumno es un pedófilo, y decide que debe denunciarlo a la policía. El pastor, para evitar que quede destrozada la vida de su hijo, trata de convencerla y una serie de desgraciadas desdichas culmina en el secuestro de la profesora, en el sótano de su casa. Paralelamente, un convicto ingresado desde hace diez en el corredor de la muerte, en un penal de EEUU, recibe a un gran número de visitantes que le solicitan que resuelva casos, a modo de un detective privado que trabaja desde su celda. A él acude una periodista, que es amiga de la profesora desaparecida, y le pide que ayude en su búsqueda.
Inside man es una miniserie con dos historias que se entrelazan. La parte donde se narran las tribulaciones del pastor es magnífica y trepidante, con saltos que mantienen el interés del público y lo enganchan a la pantalla. La parte del condenado a muerte sigue los patrones de la novela enigma, donde prima la lógica; no en vano, el creador de la serie lo es también de Sherlock. Ambas se confluyen en un final al que, para mi gusto, quizás podría haberse llegado sin esta segunda trama.
Hombre muerto no sabe vivir es una película de dos mil veintidós, ópera prima del director Ezekiel Montes. Él es también el productor y el autor del guion. Contó con un nutrido grupo de actores de fama., entre ellos Antonio Dechent, Elena Martínez, Rubén Ochandiano, Manuel de Blas, Roberto García Ruis, Nacho Novo, Paco Tous, Juanma Lara y Jesús Castro, entre otros. Obtuvo el premio de la Academia de Cine de Andalucía al mejor actor protagonista y a los efectos especiales, y el del Festival de Málaga a la mejor producción.
Una veterana organización hizo fortuna en el pasado con la construcción, los puticlubs y la droga. Pero la crisis del ladrillo ha mermado su liquidez y ahora tienen problemas con el resto de negocios. Además, su jefe está en vías de jubilación, y su segundo de a bordo intenta mantener el tipo como puede. Sufren el robo consecutivo de dos alijos de droga, lo que los pone en un aprieto con sus proveedores, justo en el momento en que aparece una nueva droga que el capo se resiste a integrar, en contra de la voluntad de su hijo, un joven muy violento y ambicioso.
Hombre muerto no sabe vivir es una película extremadamente violenta, tarantiniana, que nos muestra con toda crudeza el mundo del narcotráfico, la corrupción política y el difícil relevo generacional entre quienes lo mandan. Es un film para almas no demasiado sensibles, con unos efectos especiales muy escalofriantes, con una ambientación espectacular y unos personajes creíbles.
Argentina fue gobernada entre mil novecientos setenta y seis y mil novecientos ochenta y tres por una dictadura militar, fruto del golpe de estado que derrocó a María Estela Martínez, la cual había asumido la presidencia del país en mil novecientos setenta y cuatro, tras la muerte de su marido Juan Domingo Perón. Durante la dictadura se hicieron internacionalmente patentes la desaparición de personas y el robo de niños. En el ochenta y dos se produjo la derrota ante Gran Bretaña, en la guerra de las Malvinas. Al año siguiente, la dictadura militar fue sustituida por el gobierno electo de Raúl Alfonsín. Un decreto del gobierno, del ochenta y tres, ordenó someter a proceso judicial a la junta militar. El juicio se llevó a cabo en mil novecientos ochenta y cinco, y la acusación estuvo encabezada por el fiscal Julio César Strassera.
Argentina, 1985 es una coproducción argentino-estadounidense de dos mil veintidós, dirigida por Santiago Mitre según un guion del propio director y de Mariano Linás. Fue protagonizada, en sus papeles principales, por Ricardo Darín y Peter Lanzani. Fue premiada por la Federación Internacional de la Prensa Cinematográfica y por el Festival de San Sebastián.
El fiscal Julio Strassera recibe el encargo de presentar acusación contra la cúpula militar por delitos de torturas y desapariciones sistemáticas. Para ello ha de reclutar un grupo de colaboradores bisoños, ya que los funcionarios se niegan a hacerlo por simpatías con el régimen depuesto o simplemente por miedo. Tras recabar multitud de testimonios y recibir incontables amenazas, se abre el juicio.
Argentina, 1985 es una película reivindicativa. Es un film ágil y a la vez intimista, que retrata una etapa oscura y no deja de poner los vellos de punta. Un film que no despierta la admiración por la resolución de un país a la hora de depurar responsabilidades, cosa que no ocurre en todos los sitios. También es un gran trabajo del carismático actor que la protagoniza, y cuenta con una fotografía que afianza lo que se quiere relatar; y con el recurso de incluir, de tanto en tanto, algunas imágenes de época.
Les papillons noirs es una miniserie francesa de dos mil veintidós de seis capítulos, cada uno de una hora de duración, dirigida por Olivier Abbou. El guion es de Olivier Abbou y Bruno Merle. Fue protagonizada por Nicolas Duvauchelle, Lola Créton, Niels Arestrup, Alyzee Costes, Sami Bouajila, Alice Belaïdi, Axel Granberger y Brigitte Catillon.
Un escritor en malos momentos es contratado por un hombre de edad avanzada que desea convertir en novela un pasaje muy especial de su vida. Él y una amiga cometieron un doble homicidio en los años setenta, cuando uno de los fallecidos intentó abusar de ella. A partir de ahí entablaron una relación de amor y, cada año, durante sus vacaciones, fueron matando a una persona más, hasta dejar sembrado el sur de Francia de un buen número de cadáveres. Un policía les sigue la pista, al tiempo que el escritor decide que publicará la historia como si fuera de su invención.
Las mariposas negras posee una trama magníficamete hilvanada, donde se simultanéa el presente y el pasado, ofreciendo una historia macabra y también sorprendente. Incluso la fotografái es diferentye, para cada momento histórico.
Grupo 7 es un film de dos mil doce dirigido por Alberto Rodríguez bajo un guion de Rafael Cobos, que también ha sido autor del guion de La isla mínima y de la adaptación de El hombre de las mil caras. Estuvo interpretado por Antonio de la Torre, Mario Casas, Joaquín Núñez y José Manuel Poga, entre otros.
Sevilla organizará en unos años la exposición universal del noventa y dos. Un grupo de policías (la mayoría pre-democráticos) luchan contra el narcotráfico en la ciudad, con métodos que no solo bordean la ley, sino que la transgreden abiertamente. La diferencia entre agentes de la ley y delincuentes no está netamente delimitada, cuando este grupo actúa.
Grupo 7 es una radiografía precisa del momento policial en España, entre finales de los ochenta y principios de los noventa, cuando se ha estrenado una nueva ley que rige a los cuerpos de seguridad y estos se ven fiscalizados por la judicatura y los medios de comunicación, al tiempo que se les exigen mayores resultados, pero dentro de un orden.
Alexis Ravelo es un escritor canario. Entre dos mil seis y dos mil veintidós ha escrito dieciséis novelas, entre ellas La estrategia del pequinés, aparecida en dos mil trece, por la que recibió el Premio Hammet y el Premio Tormo de Las Casas Ahorcadas. Elio Quiroga la llevó al cine seis años después y fue protagonizada por Unax Ugalde, Kira Miró, Enrique Alcides, Jorge Bosch, Ismael Fritsch y Pep Jové, entre otros.
La estrategia del pequinés es simple: al pequeño perro, acosado por otro más grande, solo le queda crecerse para atemorizar a su adversario y poder salir con vida del mal encuentro.
Un hombre que debía recoger un alijo no llega a tiempo y la droga es incautada por la policía. El sanguinario destinatario del cargamento se venga del subordinado que ha fallado, pero él mismo debe responder ante los capos que tiene por encima, que le exigen que les pague el doble de lo que inicialmente valía el alijo perdido. Para conseguir el dinero planea robar a su propio jefe, en su casa, y cuenta con un ladrón retirado y éste con un pequeño delincuente en paro y una prostituta que está harta de su oficio.
En La estrategia del pequinés hay dos momentos: uno que llega hasta el robo y el posterior tiroteo, y otro que narra la persecución que los capos realizan sobre los asaltantes que han sobrevivido. Es un film ágil que, quizás, podría ser más espectacular. Pero es una película digna de ver, tras la que se ve que ha habido una buena novela.
Antonio Muñoz Molina es un prolífico autor español, miembro de la Real Academia de la Lengua española. En mil novecientos noventa y siete publicó su octava novela, Plenilunio, que sería llevada a la gran pantalla tres años después, dirigida por Imanol Irube e interpretada en sus papeles principales por Miguel Ángel Solá, Juan Diego Botto, Adriana Ozores y con un pequeño papel de Fernando Fernán Gómez. El guión adaptado fue de Elvira Lindo.
Un policía exalcohólico ha dejado Bilbao y se traslada a una capital de provincia pequeña y relajada. Llega tras ser acosado presuntamente por elementos ligados a la banda terrorista ETA, situación que ha acabado por desquiziar a su esposa, ingresada en un sanatorio mental. En un bosque aparece el cadáver de una niña, asaltada sexualmente por un psicópata. El policía deberá resolver el caso.
Planilunio es una película de hace más de veinte años, que aguanta bien el paso del tiempo. Es un film con personajes redondos, una puesta en escena inquietante y una ambientación idonea. Destacan las interpretaciones del joven psicópata y del policía, y se nota que tras el film hay una novela.
Pedro Antonio de Alarcón fue un escritor español del siglo XIX que escribió siete novelas, tres recopilaciones de cuentos, poesías, una obra de teatro, libros de viajes y diversos artículos. En mil ochocientos cincuenta y tres publicó el relato El clavo, que modificó en mil ochocientos ochenta y volvió a publicar en la colección Cuentos amatorios. El clavo se constituyó como una obra romántica y a la vez de corte negrocriminal, estando entre las primeras obras de corte policiaco de la literatura española.
En la década de mil novecientos cuarenta fue lleva al cine la adaptación cinematográfica dirigida por Rafael Gil, con un guion del propio director y de Eduardo Marquina. Sus principales papeles fueron interpretados por Amparo Rivelles y Rafael Durán, entre otros.
En un viaje en diligencia, un juez conoce a una joven de la que se enamora. Se prometen en matrimonio, pero el juez debe tomar posesión de su nueva plaza, por lo que posponen para una fecha posterior el reencontrase. Mientras, el juez envía a su prometida una serie de cartas que ella no responde. Consternado, avanza su regreso y no encuentra a la mujer. Cinco años después, el juez ha sido trasladado a otra población y descubre accidentalmente el cráneo de una persona asesinada al clavarle un clavo en el cráneo, que pasó desapercibido, catalogándose la muerte como natural.
El clavo es un film de posguerra y se ha de ver como tal, con toda su carga romántica y hasta almibarada. En la década de los setenta fue reinterpretado como producción televisiva de cinco capítulos, en una de aquellas tan celebradas novelas que se pasaban a las ocho de la tarde. La trama es ingeniosa y revela una película de calidad, para mi gusto, tras la que hay -como sucede a menudo- una obra literaria.
Evil Under The Sun es una novela de Agatha Christie publicada en mil novecientos cuarenta y uno dentro de la serie Poirot. Ha sido adaptada dos veces a la pantalla, una de ellas en dos mil uno, dentro de la serie protagonizada por David Suchet, y otra con el formato film que hoy nos ocupa.
Guy Hamilton llevó la novela al cine en mil novecientos ochenta y dos, bajo un guión adaptado por Anthony Shaffer, que ya había trabajado en las producción de Muerte en el Nilo y participaría también en Cita con la muerte. El film se inscribe en la serie de películas donde Poirot fue encarnado por Peter Ustinov, del cual hemos hablado en estas páginas, aquí. En el reparto intervinieron actores como Maggie Smith, Diana Rigg, Colin Blakely, Jane Birkin y Nicholas Clay, entre otros.
En el film, Poirot ha recibido el encargo de averiguar por qué un magnate ha pretendido asegurar un diamante falso por una alta cantidad de dinero. Esta pieza la entregó a su amante, una actriz reconocida, y ella le retornó una copia. El detective acaba pasando unos días en un hotel de la costa griega, donde se hospeda la antigua amante del magnate propietario de la joya -una mujer odiosa- y otros personajes entre los que están un productor de espectáculos, un escritor y el esposo de la actriz y su hijastra. Todos tienen una u otra razón para odiar a la mujer. Al hotel ha llegado también un gigoló que inicia un affaire con la actriz, a pesar de que sue esposa también se aloja en el hotel. Un día, al mediodía, la actriz aparece muerta en la playa y Poirot debe averiguar quién la ha asesinado.
Muerte bajo el sol es un film enigma sembrado de todas las carácterísticas del género, con uno de mis Poirots preferidos. Una película muy digna de ver y que resiste bien el paso del tiempo, a mi juicio.
La educación es un producto de la cultura, al mismo tiempo que la cultura se difunde, desarrolla y profundiza con la educación. ... Es necesario porque interferencias políticas están banalizando y empobreciendo ambos conceptos y a la administración pública de ambos productos, conquistados en la historia por la humanidad.
Laurentino Vélez-Pelligrini, (París,1969). Soy sociólogo de la cultura,ensayista y escritor. Durante los últimos años evolucioné de la Teoría Social a la Teoría y Crítica Literaria. Mis centros de interés versan en torno a la Guerra Civil española y la Segunda Guerra Mundial.